En cuestión de horas hubo varios accidentes aeronáuticos, el más grave en Corea del Sur con casi 180 personas. Otros se dieron en Canadá, Noruega, México y, Emiratos Árabes.
Por Gabriel Michi
Se sabe que el avión es el medio de transporte más seguro de todos. Y las estadísticas así lo demuestran: por ejemplo, en 2023 -uno de los años con menor cantidad de incidentes aéreos y fallecidos en ellos- la tasa de accidentes aéreos fue de uno por cada 1,26 millones de vuelos. Y es más, mientras que en ese año viajaron alrededor de 4.500 millones de pasajeros, sólo hubo 72 fallecidos en un accidente -el único letal en todo ese período-. ocurrido en un avión de turbohélice de Nepal. Sin embargo, hay momentos donde pareciera que las noticias sobre un tipo de siniestros se multiplicaran. Y eso es lo que parce haber ocurrido en las últimas horas: una sucesión de accidentes aéreos en distintas partes del planeta, que despertaron las luces de alerta. El más grave ocurrió en Corea del Sur (donde en realidad hubo dos incidentes), pero también hubo otro en Canadá (con un vuelo canadiense), en Noruega y en México, sin mencionar otros episodios menores ocurridos en EE.UU. y el derribo del avión de Azerbayan Airlines en Kazajistan por parte de un misil ruso y que ocurrió hace unos días.
Pero sin dudas el sábado 28 de diciembre quedará grabado en la historia como un día oscuro para la aviación internacional. El más grave de los accidentes, en Corea del Sur, dejó 179 muertos y hubo apenas 2 sobrevivientes: ocurrió en Muan cuando el avión(un Boeing 737-800) de la compañía Jeju Air se quedó sin tren de aterrizaje (aparentemente tras chocar con un ave) y en tierra terminó incrustado contra un paredón situado al final de la pista. Sólo dos miembros de la tripulación pudieron ser rescatadas del avión en llamas, del total de 181 personas que había a bordo. El vuelo JJA-2216 viajaba desde la capital de Tailandia, Bangkok, y Muan, en el suroeste de Corea del Sur. Es el accidente más grave de toda la historia de la aviación de Surcorea. Horas después, otro avión de Jeju Air -que realizaba una ruta interna en Corea del Sur- tuvo que regresar al aeropuerto de origen tras presentar una falla en el tren de aterrizaje, similar a la que del primero. El vuelo -con 161 pasajeros a bordo- debió regresar al aeropuerto de Gimpo y realizar un aterrizaje de emergencia, sin que se reportasen ni heridos ni víctimas fatales.
El mismo sábado 28 de diciembre en que se desataba la tragedia coreana, en Canadá, un avión de la compañía Air Canada sufrió un accidente al aterrizar de emergencia en el Aeropuerto Internacional de Halifax Stanfield (Nueva Escocia). Como en el caso del JJA-2216 su problema se suscitó en el tren de aterrizaje. El vuelo, con 70 pasajeros a bordo, era operado por PAL Airlines. Había partido del Aeropuerto Internacional de San Juan de Terranova y derrapó de emergencia en la pista. Los equipos de bomberos lograron apagar las llamas y evacuaron de forma inmediata a todos los pasajeros, en medio de escenas de mucho temor.
Como si fuera una maldición sobre los trenes de aterrizaje, algo similar ocurrió en Noruega con un vuelo de Royal Dutch Airlines (KLM). Cuando estaba tocando tierra después del viaje, falló el tren de aterrizaje en el aeropuerto de Torp, en Sandefjord. El Boeing 737-800 (PH-BXM) se dirigía de Oslo a Ámsterdam, cuando sufrió una avería hidráulica y terminó en el pasto al lado de la pista. Por suerte no hubo que lamentar heridos ni víctimas fatales.
En tanto, en México, un avión de la aerolínea Viva Aerobús declaró "estado de emergencia" cuando sobrevolaba el Golfo de México, lo que lo obligó a realizar un aterrizaje de emergencia. La aeronave -un Airbus A320- viajaba de Cancún a Ciudad Juárez. Apenas 50 minutos de haber despegado de Cancún, la cabina del avión perdió la presión del aire y tuvo que descender de emergencia en medio del Golfo de México para finalmente aterrizar en el Aeropuerto Internacional de Monterrey. Tampoco en este caso hubo muertos o heridos.
También se conoció otro accidente fatal ocurrido el jueves 26 de diciembre con una avioneta en Emiratos Árabes Unidos. Allí dos personas murieron al estrellarse contra el mar frente a la costa de Ras al Jaima. En la nave perteneciente al Al Jazira Air Sports Club falleció la piloto (una joven pakistaní de 29 años) y el copiloto (un médico indio de 26 años), quien había contratado el vuelo para hacer turismo.
Estos accidentes -algunos con más suerte que otros- no fueron los únicos episodios que tuvieron como protagonista al mundo del transporte aéreo. Hubo también otros capítulos menores que se suscitaron en las mismas agitadas hora. De hecho, la Administración Federal de Aviación de EE.UU. ha abierto una investigación a raíz de un incidente, que se produjo en una pista del aeropuerto de Los Ángeles, cuando dos aviones de pasajeros estuvieron a punto de chocar. Un Embraer E135, operado por la compañía chárter Key Lime Air, acababa de aterrizar y se dirigía a su puente de embarque, cuando recibió instrucciones de detenerse en un punto determinado para no cruzar la pista en la trayectoria de un vuelo comercial de Delta Airlines con destino a Atlanta -un Airbus A321- que estaba despegando. En el chárter viajaba el equipo de basket masculino de la Universidad Gonzaga (Washington). En la grabación se escucha decir a los controladores aéreo: "¡Para! ¡Para! ¡Para!".
Mientras todo eso ocurría, otro episodio insólito se suscitaba en el Aeropuerto Internacional de Seattle-Tacoma, en EE. UU. Tras el aterrizaje de un vuelo de Alaska Airlines procedente de Milwaukee, una pasajera -en pleno ataque de nervios- abrió una puerta de emergencia y se subió al ala del avión, donde permaneció durante varios minutos antes de que alguien se percatara de su presencia. Los bomberos finalmente tuvieron que intervenir para ayudarla a bajar.
La sucesión de hechos desafortunados que se desató en el mundo aeronáutico y que se dieron en tan pocas horas estuvo precedida por una terrible tragedia. La caída de un vuelo de Azerbayan Airlines (con 67 personas a bordo) en Kazajistán. En los últimos días creció la hipótesis de que el siniestro -donde murieron 38 personas y hubo milagrosamente 29 sobrevivientes- fue provocado accidentalmente por un misil o artillería rusa. De hecho, el propio presidente Vladimir Putin pidió disculpas aunque sin hablar sobre la responsabilidad de su país en el derribo fortuito.
Con estos últimos episodios hubo más de 200 muertos por accidentes o incidentes aéreos en apenas unos días, triplicando sólo con estos hechos todo lo ocurrido en 2023. Según las estadísticas del año pasado, una persona tendría que viajar todos los días durante 103.239 años para sufrir un accidente fatal, habiendo apenas un muerto cada 0,000000016 viajeros. Ahora, con estos episodios recientes, esa cifra se redujo. Es más, el cierre de 2024 será recordado como uno de los más trágicos en la historia reciente de la aviación mundial, en particular por los siniestros de Corea del Sur y Kazajistán. En todo el año, según los registros de Mundonews, unas 458 personas perdieron la vida en accidentes aeronáuticos, es decir, 6 veces más que el año anterior, es decir, un pasajero cada casi 10 millones que se subieron a un avión. Sin embargo, el avión sigue siendo por lejos el medio de transporte más confiable y seguro del mundo. A pesar de estar viviendo unas horas de terror.
DOS ACCIDENTES CON ALTO IMPACTO POLÍTICO
En materia de incidentes letales aeronáuticos este año dejó también algunos hechos políticamente muy fuertes como la muerte del ex presidente de Chile, Sebastián Piñera, en un accidente ocurrido el 6 de febrero de 2024 mientras piloteaba su helicóptero en la comuna de Lago Ranco, en la región de Los Ríos, aunque sus tres acompañantes sobrevivieron al siniestro. Por su parte, el 29 de mayo de 2024 en otro accidente de helicóptero fallecieron el presidente de Irán, Ebrahim Raisi, junto al ministro de Asuntos Exteriores, Hossein Amir-Abdollahian, el gobernador de Azerbaiyán Oriental, Malek Rahmati, y el representante del líder supremo en esa región, Mohammad Ali Ale-Hashem, además de tres tripulantes al caer su helicóptero en la mencionada provincia.
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